
Comentado por el Dr. Luis Felipe Hernández Matute
Visión Integral
La Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE) es considerada una de las principales patologías que producen disminución severa de la visión a nivel mundial en pacientes con edades superiores a 50 años.
Aunque su prevalencia oscila aproximadamente sobre el 10% de la población, con el incremento de la esperanza de vida se estima que su incidencia se incremente en los próximos años.
La pérdida visual que induce la DMAE se produce debido a la degeneración progresiva de la zona responsable de la visión central, denominada mácula, la cual permite una visión con detalle. Si los familiares más cercanos la padecen existe mayor probabilidad de que en el futuro se manifieste, debido a que es una patología que tiene un componente hereditario. Existen otros factores de riesgo que pueden inducir el desarrollo de la DMAE como fumar tabaco, hipertensión o la obesidad entre otros.
Según el Dr. Luis Felipe Hernández, especialista en Retina y Vítreo, considerar el factor del tabaco es importante ya que incluso estar en ambientes compartidos con fumadores puede afectar la mácula pues está ampliamente demostrado que la nicotina del tabaco es sumamente tóxica para la misma.
Cuando se comienza a desarrollar la DMAE el paciente percibirá que las imágenes de la visión central están distorsionadas, aunque la visión periférica no esté afectada. Sin embargo, conforme avance la enfermedad, si no se diagnostica y se trata adecuadamente, la lesión en el área central de la retina continuará acentuándose produciendo una disminución severa de la visión.
Por esto, resulta de especial importancia realizar un diagnóstico temprano ante los primeros síntomas para planificar el tratamiento lo antes posible.
¿Cuáles son los examenes de diagnóstico para la DMAE?
Cuando un paciente con edad superior a 50 años acude a consulta oftalmológica con algún síntoma relacionado con la DMAE, en primer lugar se evaluará su agudeza visual a todas las distancias. A continuación, el especialista le presentará un test conocido como Rejilla de Amsler, el cual está formado por unas cuadrículas y le preguntará como ve las líneas de las mismas. La Rejilla de Amsler es una prueba de tamizaje de la DMAE que permite saber si el paciente ve las líneas onduladas, es decir, permite diagnosticar si la visión central está distorsionada.
Realizadas dichas pruebas, se procederá a dilatar la pupila para que el médico evalúe el fondo de ojo con el oftalmoscopio, y con el Tomógrafo de Coherencia Óptica (OCT) y la angiografía retiniana con flouresceína (AGF). Estas son las pruebas diagnósticas que con mayor frecuencia se utilizan para conocer la calidad visual del paciente y el estado de su retina. Si el médico lo considera conveniente podrá requerir otras pruebas diagnósticas.
¿Cuáles son los tratamientos de la DMAE en función de su evolución?
La DMAE es una patología que presenta diferentes fases de evolución. La fase inicial conocida como la “forma seca” se caracteriza por la presencia de depósitos amarillentos, denominados drusas, que atrofian el área macular y que inducen una pérdida de visión lenta. La forma seca o no exudativa de la DMAE es la más frecuente en la población, pero para ella no existe un tratamiento eficaz. Se recomienda, entonces, la ingesta de antioxidantes y suplementos vitamínicos. Cuando la DMAE seca se ha conseguido es
tabilizar y se ha perdido algo de visión, se recurre a recetar ayudas visuales de baja visión o a los implantes de lentes intraoculares para intentar que las imágenes se perciban desde las zonas de la retina que no han sido afectadas. Los sistemas de lentes intraoculares son una opción cada vez más extendida que obtiene buenos resultados en la mejora de la calidad visual en pacientes con DMAE seca.
Aún habiéndose estabilizado la forma seca de la DMAE es necesario la realización de revisiones oftalmológicas periódicamente según criterio del oftalmólogo. Si la DMAE progresa a la forma húmeda, se formarán nuevos vasos sanguíneos como hemorragias causando una la pérdida de visión más rápida en comparación con la forma seca.
Cuando la DMAE progresa a la forma húmeda, el tratamiento de elección son las inyecciones con fármacos antiangiogénicos, aunque también se están realizando avances considerables en la terapia genética.
El Dr. Luis Felipe Hernández Matute, especialista en Retina y Vítreo, agrega que es muy importante hacer énfasis en que la DMAE se presenta en una edad cuando la mayor parte de personas tiene una vida menos activa, más sedentaria y por lo tanto sus actividades principales como la lectura, la computadora, las manualidades, ver televisión, etc. se ven muy afectadas y puede llegarse al extremo de no poderlas realizar. Esto produce, adicionalmente, serios problemas de depresión en las personas que padecen DMAE.
Recuerde que el ejercicio moderado y la sana alimentación, así como el examen periódico de los ojos por un especialista, son recomendables.
Visión Integral es una clínica oftalmológica privada ubicada en la ciudad de Guatemala. Somos un equipo de nueve especialistas graduados de las mejores Universidades de Guatemala, Estados Unidos, Colombia y Canadá que trabajamos juntos desde 1987. Valoramos sobretodo su salud integral.

contáctenos
otros artículos